Parece que el sector inmobiliario se recupera

Son muchos los clientes que se acercan a nuestras oficinas y nos hacen este comentario:

«parece que el sector inmobiliario se recupera», «parece que la cosa se está animando» cuando hablan de la cosa se refieren a la “economía”. Mi opinión siempre es la misma:

cierto que los clientes compradores están mostrando más interés en la oferta de viviendas en Antequera; Que se reciben algunas más llamadas que en meses anteriores, que incluso, está volviendo aquella demanda de clientes que ha estado desaparecida durante estos años de recesión. Aquellos que desean comprar una vivienda en Antequera y que desafortunadamente, no disponen ni para los gastos de la compra. Personas ingenuas que continúan pensando que las entidades financieras han vuelto a financiar el 100% + los gastos. De ahí que se cumpla lo que siempre se ha dicho, que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra. Sin embargo, del anterior tropiezo algunos aprendieron la lección, mientras que otros, continúan caminando con los ojos vendados.

Vivimos en una sociedad en la que en mi opinión, estamos manipulados por los medios de comunicación, dependiendo del medio que leas o escuches, te harán ver el vaso medio lleno, o medio vacío. Puedes comprobarlo fácilmente, busca google “situación actual del mercado inmobiliario en España” y encontrarás noticias diciendo que se ha reactivado y otras que todavía le queda recorrido a la baja.

Es cierto que la economía a nivel nacional se está recuperando, sobre todo debido a las exportaciones de aquellas empresas que decidieron en su día cruzar las fronteras y expandirse internacionalmente. Sin embargo, también soy de la opinión, que esas cifras en las que se apoyan los economistas y expertos en la materia para decir que esto va mejor, son cifras macroeconómicas y que dependiendo de quién las esté leyendo, se van a interpretar de una forma u otra. Es decir, que todavía ese crecimiento no lo percibe el ciudadano de a pie.

Para mí hay un indicador económico muy claro y visible, EL PARO. Mientras no se genere empleo de calidad y continuemos con esa elevada tasa de desempleo, va a ser muy difícil que esto levante.

Se ha destruido mucho empleo y muy rápidamente en estos años de crisis, y eso costará ahora tiempo para que vuelva a unos niveles óptimos.

Un ejemplo que puede ser real:

Una PYME puede cesar en su actividad en menos de 30 días y despedir a sus 10 trabajadores. Sin embargo, ese mismo empresario, para comenzar esa actividad necesitó, más de 6 meses sólo para los trámites burocráticos que le exigió la administración; Luego tuvo que adaptar el local, nave o oficina para esa actividad, realizar la obra civil, mobiliario, etc. y eso le supuso un retraso de otros 3 meses mínimo; Comenzó su actividad, primero él solo. Posteriormente y pasado un año, contrato a una persona para la administración. Transcurrido un año y medio desde que abrió sus puertas, contrató al primer empleado. Pasados dos años y puesto que la facturación crecía exponencialmente, contrató al segundo empleado; y alcanzó los diez empleados, pasados los ocho / diez años y teniendo en cuenta, que la actividad se comenzó en un periodo de bonanza económica.

Quiere decir esto, que generar empleo de calidad, es mucho más lento, que destruirlo y en estos siete años, eso es lo que ha pasado. En el mejor de los supuestos, construir todo el daño que se ha ocasionado al empleo, no llevará como poco de ocho a diez años.

Por lo tanto, el ciudadano desempleado necesita disponer de, primero de un empleo; Luego que en ese empleo le ofrezca cierta garantía y estabilidad; Que la retribución que perciba, sea suficiente como para poder ahorrar o destinar parte de esos ingresos a la compra de una vivienda; Que por supuesto, no tenga deudas pendientes con entidades financieras, familia, etc. porque si es así, hasta que no las liquide, no se planteará comprar casa en Antequera.

¿Cuál es el termómetro que tiene el ciudadano de a pie, para decir que la cosa se está animando? Lo que lee y escucha en los medios de comunicación y que está viendo los Bares y Restaurantes llenos los fines de semana.

Yo le contesto; claro, la gente ya está cansada de estar en casa, y necesitan un escape. Y dicen, bueno por lo menos voy a tomar unas cañas, y que salga el sol por Antequera. Pero esas personas, no están pensando en comprar vivienda en Antequera, porque ahora con mucha suerte, están en el primer paso que he comentado antes, es decir, tiene un empleo precario, para ir “medio tirando”, que han conseguido después de estar 2/3 años en el paro, acaban de empezar a trabajar con un contrato temporal, haciendo más horas que un reloj, y cobrando como mucho el salario mínimo interprofesional. ¿Cómo va a comprar piso en Antequera esa persona?

Bueno entonces, ¿Cuál es la situación real?

Bien, pues en mi opinión y experiencia, es cierto que se está vendiendo más. Están comprando aquellos clientes que disponen de dinero en el banco y que observando el interés que su banco les ofrece, deciden invertirlo en vivienda, pues alquilándola, siempre les dará mayores rentabilidades.

También están comprando, aquellos que disponen de una cantidad para dar de entrada, y que por suerte, los recortes de personal de su empresa no les llegaron a ellos, y ahora su empresa les genera más estabilidad y confianza, porque su jefe acaba de contratar a una persona más, y por lo tanto, han perdido el miedo a contratar una hipoteca, aunque no se fían de hacerlo a muy largo plazo, por si acaso.

Y están comprando sobre todo propiedades de entidades financieras, aquellos que tienen para aportar la cantidad correspondiente a los gastos de compra, y que disponen de una cierta estabilidad laboral. Aunque en estos casos las entidades están solicitando que se refuerce la operación con algún aval patrimonial.

Bajo mi punto de vista, esta es la situación actual del sector inmobiliario en Antequera.

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