No hay respuestas ni verdades absolutas a estas pregunta, pero sí algunas pistas que te pueden guiar hacia la decisión más rentable de este momento (Septiembre 2017).
El alquiler es una buena opción a corto medio plazo, pues no requiere una gasto al entrar a vivir en un piso. Pero si es a largo plazo, la mayoría se decanta por la compra, porque una estancia prolongada, te permite amortizar los gastos iniciales de la compra.
Así que si se va a superar la media de 5 años viviendo de alquiler, es más rentable la compra, pero esto es sólo una media. Pero ante todo, para decantarte por una u otra opción, debes antes mirar tu bolsillo.
Tres claves a favor de la compra:
- La vivienda ha dejado de bajar en la proporción que lo venía haciendo en los últimos años y en zonas Premium y con poca oferta, empieza a repuntar.
- Las hipotecas están muy baratas. Los tipos de interés están en mínimos históricos, lo que hace que exista una amplia oferta hipotecas.
- Se está creando una “burbuja” en el mercado de alquiler en Antequera. Debido principalmente, a la poca oferta de viviendas en alquiler que existe actualmente, y la elevada demanda, producida por la activación del mercado laboral (personas que se trasladan por motivos de trabajo a Antequera, estudiantes, rupturas de parejas, etc.). Esto hace que los propietarios de vivienda en alquiler, empiecen a subir los precios de la renta ante las escasez, y que la vivienda que antes se alquilaban en 350/375 €/mes, ahora ya no la encuentras por menos de 425/450 € /mes.
Por lo tanto, esto hace que la diferencia entre la cuota a pagar por una hipoteca media, y la renta mensual por alquiler, sea considerable
A continuación te pongo un ejemplo:
Un piso de 3 dormitorios con garaje se está alquilando en torno a los 470 €/mes. Comprar un piso de las mismas características con una hipoteca al 1,25% y 30 años de duración, puede suponer una cuota de 330 €/mes.
Por lo que en este ejemplo el ahorro anual sería de 1.680 €.
Tres claves a favor del alquiler:
- No tienes que pagar los gastos iniciales, ni la comunidad de vecinos, ni el IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles).
- No tienes la atadura de la hipoteca.
- Flexibilidad para cambiar de piso cuando lo desees.
Claves en contra de la compra:
- Pueden subir los tipo de interés de la hipoteca. Por eso, si te decides a comprar ahora, lo mejor es elegir la opción de un tipo fijo para tu hipoteca, así evitarás sustos en una hipotética subida, y estarás tranquilo de que ocurra lo que ocurra, tu siempre pagará la misma cuota.
- Los gastos de la compra pueden ser elevados, sobre todo si tienes más de treinta y cinco años o compras por encima de los 130.000 €. En este supuesto pagarás un 8% de Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, a eso tendrás que añadir los gastos de notaría y registros, así como, los gastos derivados de la constitución de hipoteca.
- Una vez compres la vivienda, deberás hacer frente a unos gastos fijos mensuales, como la comunidad, contribución y seguro de hogar.
Claves en contra del alquiler:
- Al final del arriendo la vivienda no es tuya. En algunos casos con tu renta, están ayudando al propietario a que pague su hipoteca.
- La renta puede subir según el IPC (Índice de Precios al Consumo) o para la próxima renovación del contrato, el propietario puede solicitarte un incremento de la misma.
- Hay caseros que no se preocupan mucho por la vivienda y no corren con los gastos de mantenimiento de esta.
Si lo deseas, en Pisomap podemos ayudarte a estudiar lo mejor para ti.